Cámaras de circuito cerrado de televisión (CCTV) dotadas de sensores con inteligencia artificial (IA) no le abrirán las puertas en los negocios a aquellas personas que no cuenten con un barbijo colocado de forma correcta. Se trata de un tipo de tecnología pensado y desarrollado en todo el Reino Unido, y está cumpliendo su primer mes de prueba.
La inteligencia artificial está cada vez más presente en el día a día de las personas. Y la lucha contra el COVID-19 no es la excepción. En este caso, las cámaras utilizan IA para determinar si quien quiere ingresar a una tienda lleva o no un tapabocas y asimismo si lo tiene colocado de la manera en que las autoridades sanitarias lo indican.
Por supuesto que este tipo de sensor requiere de puertas que se abran y cierren de forma automática, es decir, automatizadas. Sin embargo, su implementación no es compleja, difícil o muy costosa, advirtió Tom Ironside, director de Regulaciones del British Retail Consortium (BRC). “Si bien la tecnología sin dudas puede hacer una contribución útil, lo importante es que todos seamos razonables y respetuosos los unos con los otros y a su vez con las reglas”, dijo a MailOnline.
De acuerdo al experto, “la otra cara del uso de un sistema automatizado es que les da confianza a los clientes preocupados por el virus cuando ingresan a una tienda COVID-19 segura y estrictamente controlada”.
Por otro lado más de mil escáneres con IA ya están instalados en Londres, Manchester y otras importantes ciudades, y se encargan de monitorear qué tan cerca se acercan los peatones entre sí en estos distritos y recopilan información que ayuda al gobierno para tener dimensión de los alcances del distanciamiento social.
Los sensores también están en funcionamiento en Oxford, Cambridge y Nottingham. El tema de la privacidad se planteó en una reunión de escrutinio del consejo del condado de Kent en los últimos días después de que un concejal local, Simon Jones, revelara que estaban evaluando adquirir las cámaras.
Para el director ejecutivo de la compañía que fabrica los sensores, Peter Mildon, “las cámaras nos permiten proporcionar datos anónimos sobre cómo se está procediendo en la calle, comprender cómo se utiliza ese espacio y cómo se puede mejorar o cómo se puede hacer más seguro conlleva enormes beneficios para todos”.