Las llamadas envirotech (environmental technologies) reducen el impacto ambiental utilizando energía solar, hidráulica, eólica, mareomotriz y geotérmica, entre otras energías limpias y renovables, tecnologías que velan por un desarrollo sustentable. La optimización del consumo energético, es decir, consumir de forma eficiente, es fundamental en este camino.
Es ahí donde IoT puede cumplir un rol fundamental: medir magnitudes para poder tomar acciones de justa mesura.
Alrededor del 20% de la huella de carbono total pertenece al consumo energético edilicio y este es uno de los sectores más avanzados en optimización energética gracias a IoT. Hoy se pueden monitorear magnitudes de energía, potencia instantánea, factor de potencia, distorsión armónica, corriente, tensión y muchas más dentro de una red eléctrica y tomar acciones casi instantáneas ante la presencia de anomalías en cualquiera de estas.
Es posible verificar el estado de los generadores eléctricos y la cantidad de combustible que utilizan en caso de una interrupción prolongada de suministro. Por supuesto que todas estas variables pueden relacionarse con factores de temperatura, humedad y otras para obtener conclusiones, análisis más complejos y predicciones.
La situación actual es desafiante. Hoy consumimos una cantidad de energía que el planeta no puede regenerar, la GFN (Global Footprint Network) establece que actualmente utilizamos por año la energía de 1,7 planetas. El escenario no es sustentable, pero el aporte tecnológico es evidente y se presenta como uno de los pocos caminos viables para apaciguar los efectos del cambio climático y asegurar un futuro para todos.
Fuente: https://www.tynmagazine.com/iot-la-tecnologia-al-servicio-del-cuidado-del-medio-ambiente/